Una de las ventajas que más suelen atraer a la hora de contratar un renting es el mantenimiento del vehículo y lo que incluye. No hay una norma estándar que indique qué debe incluir este mantenimiento, dependerá, en su totalidad, del tipo de contrato de renting que elijamos y de la compañía con la que lo realicemos.
No obstante, siempre hay unos puntos básicos que, desde Renting Salvaje, vemos necesarios en cualquier contrato de renting y, por supuesto, pueden guiarte a la hora de saber si tu póliza resulta o no conveniente.
¿Qué incluye el mantenimiento del vehículo en un renting?
Lo primero que deberemos hacer es distinguir entre mantenimiento preventivo y mantenimiento correctivo. En el primer caso, es el fabricante quien dicta las pautas de revisión del coche y los puntos a evaluar.
En el caso de los mantenimientos preventivos vienen marcados por el fabricante del vehículo y casi todos los contratos de renting suelen incluirlos (exceptuando los de renting de seminuevo). En estos mantenimientos suelen reponerse algunas partes del vehículo que el contrato de renting suele cubrir.
Los mantenimientos correctivos, por su parte, suelen realizarse cuando aparece una avería que no permite al vehículo circular o hacerlo con normalidad. La compañía de renting suele hacerse cargo del importe en la mayoría de los casos, aunque, insistimos, dependerá de cada póliza. Eso sí, deberá analizarse si la avería se produce o no por un mal uso del coche, en cuyo caso correrá por cuenta del cliente.
Por tanto, si efectuamos un uso correcto del coche, no tendremos que hacernos cargo del mantenimiento del vehículo en la mayoría de los casos, ya que se incluye dentro de la cuota mensual.
Más opcional son otras labores que puede requerir nuestro vehículo como:
- La presión correcta de los neumáticos
- El cambio de los neumáticos (bien sea por un pinchazo o por el fin de su vida útil)
- El alineado de las ruedas (en caso de que haya sufrido algún percance o se cambien los neumáticos).
- La revisión de los niveles de fluido, incluyendo el rellenado de esto (refrigeración, limpiaparabrisas, aceite…)
- Revisión de luces (la revisión de las luces o la sustitución de las bombillas)
- El mantenimiento de los limpiaparabrisas y su sustitución
- Reemplazar filtros (de aire, combustible, etc.)
- Revisión de la batería o su sustitución.
- Limpieza (exterior o interior) del vehículo.
- Mantenimiento exterior del vehículo (dependerá del tipo de seguro que vaya asociado al contrato de renting).
Además de todo esto resulta muy interesante conocer si, en caso de avería, se dispondrá o no de un coche de sustitución, que permita nuestra movilidad o si derivará en un coste adicional.
El mantenimiento del vehículo supone en torno a un 40% del gasto que genera su uso. Por ello, en ocasiones pagar un poco más de cuota al mes puede suponernos un ahorro bastante importante (por contradictorio que parezca).
Desde Renting Salvaje siempre aconsejamos mirar con detenimiento todas las cláusulas de nuestro contrato sobre todo las de mantenimiento por el ahorro que puede suponernos.
Si no estás seguro sobre qué renting contratar para tener todas las ventajas al menor precio, consulta a nuestros especialistas
