Diferencias Renting Fijo Renting Flexible

Diferencias entre renting fijo y renting flexible.

En ocasiones a la hora de contratar un servicio de renting nos encontramos con dos modalidades que pueden adaptarse a nuestras necesidades: el renting fijo y el renting flexible.

Conocer la diferencia entre ambos puede darnos pistas sobre la mejor elección de nuestro contrato de renting. El renting fijo es el convencional que todos conocemos donde el usuario se compromete a utilizar el vehículo por un determinado número de meses y con unos kilómetros fijados.

La principal ventaja competitiva del renting fijo son las cuotas más bajas y la mayor estabilidad del contrato, tanto para la empresa de renting como para el cliente que lo solicita. Sin embargo, hay ocasiones en las que un renting flexible puede resultar interesante ya seas autónomo, empresa o particular.

¿Cuáles son las principales diferencias del renting flexible?

La primera característica de un renting flexible es, precisamente, la “flexibilidad” a la hora de contratar el renting tanto en duración del contrato como en kilómetros recorridos con el vehículo solicitado. De esta manera, el usuario que se decide por un renting flexible podrá cancelar el contrato cuando lo desee, sin permanencias, sin penalizaciones y, normalmente, sin kilometraje máximo ni mínimo.

Es una fórmula muy similar a lo que conocemos como “alquiler de vehículos” (aquellos que alquilamos en un destino vacacional o para una ocasión determinada). Sin embargo, esta modalidad, goza de las ventajas de un renting normal: gestión del mantenimiento del vehículo, seguro incluido, asistencia en carretera y, sobre todo, disponer del vehículo no solo días, sino meses completos o incluso años.

Es decir, podríamos definir el renting flexible como un punto intermedio entre el alquiler de vehículos y el renting fijo o tradicional, cogiendo lo mejor de ambas modalidades.

En contrapartida a esta flexibilidad, como era de esperar, son cuotas con un precio más elevadas que las de un renting fijo por lo que hay que valorar, en este caso, si necesitamos libertad de suspender el contrato cuando queramos o unas cuotas más asequibles. Es recomendable, si estas barajando contratar un renting flexible que intentes, en la medida de lo posible, sacar el valor total de lo que vas a invertir frente a un renting fijo.

¿Para quién está indicado un renting flexible?

Hay muchos casos en los que el renting flexible puede ser una buena solución para cualquier tipo de cliente (particulares, autónomos o empresas), pero casi todas son relativas a la estabilidad económica o a la persistencia en el tiempo de la necesidad.

Pero sobre todo, esta modalidad de renting está indicada para empresas que tienen una gran estacionalidad, por ejemplo, que su actividad se desarrolla solo unos meses al año. O bien particulares que solo van a utilizar el coche durante una determinada temporada debido a un cambio de vida o a otras circunstancias.

También puede ser útil para economías (tanto de empresa como de particulares) cambiantes donde no haya unos ingresos fijos mes a mes y, finalmente, proyectos empresariales que están comenzando y no se sabe si serán rentables a medio-largo plazo.

El renting fijo siempre será más rentable en aquellas situaciones donde se tenga claro el tipo de movilidad que se requiere y la duración de esta necesidad.

Si tienes dudas sobre qué tipo de renting se adapta más a tus necesidades, no lo dudes y consulta a nuestros expertos.